martes, 17 de febrero de 2015

#18F #MarchaDelSilencio

Estoy convencido que muchos de los ciudadanos que participarán este 18 de febrero de la Marcha del Silencio quieren vivir en un país mejor, donde haya justicia, donde se acabe la impunidad y la corrupción, donde todos podamos vivir en paz, felices. Y yo quiero lo mismo. Por eso me permito compartir con todos ellos, con todos ustedes, algunas preguntas, algunos pensamientos, en voz alta.

¿Cuál es el objetivo de la Marcha? ¿Qué se busca?

Se habla, principalmente, de un homenaje a Nisman. A la par se hace referencia a verdad, justicia y paz. Y se aclara que no es contra nadie, a la vez que se subraya que es no partidaria. Todo esto a nivel explícito.
Otros hablan de una movilización anti K, contra el Gobierno a quien se lo acusa de ser responsable de la muerte de Nisman, y hasta de un intento de golpe o, al menos, desestabilización.

¿Quiénes organizan? ¿Quiénes convocan?

Mediáticamente se habla de “los fiscales”. En realidad son algunos fiscales. Con solo googlear sus nombres podemos saber que algunos de ellos fueron criticados por Nisman por obstaculizar el avance de la causa AMIA. O que en otras tantas causas no han buscado, claramente, la verdad y la justicia. Que pertenecen al Poder Judicial, a la Corporación Judicial, y están molestos con el actual Gobierno. Incluso que algunos de ellos han tenido ofrecimientos de candidatos presidenciales, que también irán a la marcha, para cargos públicos.
También es obvio que los medios están jugando un papel destacado en la convocatoria. No hace falta desarrollar mucho esta idea; basta con mirar la televisión, escuchar la radio o leer los diarios. Los medios siempre responden a intereses corporativos y en esta ocasión no es diferente.
Por último, los partidos políticos opositores, y sus candidatos, también convocaron a la marcha. Detrás de una supuesta neutralidad adelantan que van a ir, invitan a toda la ciudadanía a hacerlo, y utilizan los medios y las redes sociales para darle mayor relevancia esperando capitalizar semejante movilización.

¿Quién fue Nisman, el homenajeado?

Para algunos es un héroe que se animó a denunciar a la Presidenta (léase también Presidente/Yegua/Kretina/CFK). Pocos prestan atención a que esa denuncia parece carecer de sustento jurídico. O que estuvo 10 años al frente de la Unidad Especial para la Investigación de los atentados contra la Embajada de Israel y la AMIA sin avances aparentes. O que tenía estrecha relación con la Embajada de EE.UU., la CIA y la Mossad. O que su principal informante era Stiusso, personaje oscuro, siniestro, que iremos conociendo cada vez más. Basta leer las filtraciones de wikileaks para darnos cuenta que dista mucho de ser un héroe que merezca ser homenajeado.

¿Y entonces? ¿Qué hacemos?

Por lo pronto, #YoNoVoy el #18F a la #MarchaDelSilencio. Y no voy porque me parece una convocatoria oportunista, con intencionalidad de desestabilizar al gobierno, organizada por fiscales con prontuario, fogoneada por los medios hegemónicos, y secundados por políticos opositores ávidos de instalarse, de sumar votos, utilizando todos ellos a parte de la ciudadanía para lograr sus fines inconfesables, respondiendo a sus intereses espurios, dando la espalda al Pueblo.
Pero respeto a los que deseen ir. Como dije al comienzo del artículo, con miradas diferentes, caminos distintos, quizás buscamos lo mismo. Celebro que puedan decirlo con libertad, que puedan manifestarlo en la calle, militando las ideas, poniendo el cuerpo. Y también espero que podamos abrir la mente, abrir los ojos, abrir el corazón, para seguir luchando, juntos, por el país que soñamos, con memoria, verdad, justicia, paz…


Para seguir leyendo…

El silencio y la furia” por M. Wainfeld

Los fiscales que no trabajan de fiscales” por M. Granovsky

“Detrás de Nisman” por S. O´Donnell